miércoles, 15 de julio de 2015

Manifiesto Lunes sin sol del Colectivo Baldomero Lozano. Lunes 13 de Julio de 2.015



Un lunes más estamos aquí para alzar la voz en contra de la violencia machista, una violencia que, de nuevo, se ha cobrado  tres víctimas de 22, 27 y 30 años años en Arganda, en la Palma y Arbo (Pontevedra)r espectivamente. Y existe evidencia de una cuarta con origen en León. Este año ya son 24 las mujeres asesinadas. Guardemos un minuto de silencio….

La violencia contra la mujer constituye una manifestación de relaciones de poder, históricamente desiguales entre el hombre y la mujer. Ninguna persona merece ser golpeada, humillada, violada o asesinada. La violencia machista es la manifestación más brutal de la desigualdad entre hombres y mujeres, es cualquier acto violento o agresión, ejercida sobre la mujer  en el marco de un sistema de relaciones de dominación de los hombres sobre las mujeres.

Las mujeres sabemos lo que es el miedo, y vivir con miedo no es vivir. Las investigaciones demuestran que, sistemáticamente, una mujer tiene mayor probabilidad de ser lastimada, violada o asesinada por su compañero actual o anterior que por cualquier otra persona. Los hombres que usan la violencia para resolver conflictos, están enseñando el mismo comportamiento destructivo a sus hijos.

El maltratador suele justificar en factores externos su comportamiento. No hay nada que justifique la violencia, es una estrategia de relación aprendida y elegida, no es inatata, no la aceptemos ni la normalicemos, porque no es ni aceptable ni normal. El respeto nace con todas las personas y es decisión de cada quien ejercerlo, si no te respetan no lo justifiques, la violencia es su elección. El maltratador siempre será un agresor y la mujer maltratada siempre será una victima. Aunque la sociedad Patriarcal y machista en la que vivimos pretende justificar estos comportamientos con argumentos peregrinos como que casi todas las denuncias son falsas, que las mujeres también maltratan a los hombres y muchos otros argumentos sin sentido que se desmontan rápidamente para quien tenga disposición de pensar y que no puede tapar el sol con un dedo, hoy en este Lunes Sin Sol estamos rindiendo homenaje a las dos mujeres asesinadas esta semana que suman un total de 24 en lo que va de año, 24 mujeres  con una causa común de muerte “el machismo”, por que el machismo maltrata y mata. La violencia contra las mujeres engloba múltiples formas, desde las más visibles, como el asesinato o las agresiones físicas, psíquicas y sexuales, que han sido consideradas por los organismos internacionales como formas de tortura, hasta las más sutiles e incluso toleradas socialmente, como el control social, la violencia económica u otros mecanismos de coacción dirigidos a infligir sufrimiento que deben soportar muchas mujeres a lo largo de su vida.

Normalmente estas agresiones se entrelazan y rara vez se producen de forma aislada formando un conjunto de actos cotidianos que producen en las mujeres miedo, inseguridad y falta de autoestima. Los autores de gran parte de la violencia que sufren las mujeres en su vida cotidiana son las personas con quienes comparten su vida, ya sea por ser miembros de su familia o de su comunidad, o por ser sus empleadores. Ejercen esta violencia por sentirse superiores, en una sociedad patriarcal y machista que perpetua estos roles antinaturales que coartan la vida de la mitad de la población por el mero hecho de ser mujer.
No podemos olvidar que, aun hoy, hay muchas mujeres en el mundo que son consideradas como meras posesiones primero de sus padres y después de sus esposos, mujeres que no pueden disponer de sus vidas, que tienen que vivir como otros les dicen, mujeres que en definitiva no dejan de ser mas que bienes intercambiables.

En los países desarrollados ha habido muchos avances en materia de igualdad, pero debemos tener cuídado por que es mucho más fácil retroceder que avanzar. En el caso de España el retroceso de estos últimos años es notable y, de hecho, la ONU cuestiona a nuestro Estado por sus políticas contra la discriminación y reprocha la suspensión de la Educación para la Ciudadanía en el curriculum. Aunque la evaluación de la ONU no es hacia un Gobierno concreto, sino hacia un Estado, el informe carga con dureza contra varias medias de la actual legislatura, por que no nos olvidemos de que la igualdad es cuestión de ideología, y quien no la tiene se le nota, porque no la prioriza.

Exijamos esa igualdad, simplemente por que somos iguales, simplemente por que no somos ciudadanas de segunda clase, lo somos de primera exijamos que desde todos los ámbitos: económico, político, social, cultural se actuae para que no se discrimine a nadie por el mero hecho de ser mujer, para que la igualdad que la ley nos da sea real, no sólo aparezca en un papel, para que podamos acceder a los mismos trabajos y en las mismas condiciones, para que, se nos juzgue, no se nos prejuzgue en nuestra valía, para que no se nos considere como posesión de nadie, pues sólo nos pertenecemos a nosotras mismas, para que nadie sienta terror en su propia casa, para que para todas las mujeres puedan ver el sol cada mañana  y aquí nunca vuelva a haber un lunes más sin sol.